Muchas de las consecuencias del confinamiento y medidas asociadas para reducir la propagación del coronavirus, constituyen en sí mismas factores de riesgo para el surgimiento de problemas de salud mental y alteraciones del bienestar psicológico.
Durante estos más de cinco meses de crisis sanitaria en el país, se han escuchado de forma permanente las palabras ansiedad, estrés, inseguridad, angustia y miedo, identificados como algunos de los efectos más comunes a los que se enfrenta la población producto de las restricciones de movimiento y el distanciamiento físico impuestos por la pandemia.
A ello debemos sumar otros factores, como son: los cambios de rutina, el estar todo el día con la familia o alejados de ella, compatibilizar el trabajo remoto con las tareas domésticas, las dificultades de abastecimiento, la inestabilidad económica y otras situaciones asociadas.
No ajenos a esta problemática, ya que según expertos la salud mental se podría convertir en la próxima pandemia, un grupo de académicos de la Universidad de La Frontera (UFRO) y la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) que entregan lineamientos a la mesa social COVID-19, han generado un programa de intervención que consiste en la implementación de una línea telefónica y el desarrollo de una plataforma web interactiva, ambas con el objetivo de brindar alivio emocional y facilitar la adaptación psicológica de las personas en los tiempos que corren.
Se trata de un programa denominado CALMA, que no reemplaza a una psicoterapia, sino que apunta a favorecer la regulación emocional. “Las personas en tiempos de pandemia o de crisis sanitarias, experimentan reacciones psicológicas que alteran su bienestar psicológico. Esto conlleva a que presenten problemas en su funcionamiento cotidiano, lo que puede afectar la toma de decisiones e impactar el desempeño diario, generando así una sensación de malestar general. En este sentido, intervenciones que apunten a brindar contención emocional han demostrado ser importantes, pues les permiten recuperar el equilibrio alterado, para luego comenzar a retomar sus actividades o rutina”, señala el Dr. Manuel Ortiz, académico UFRO encargado de la iniciativa.
LÍNEA TELEFÓNICA GRATUITA
CALMA pone a disposición de sus usuarios, desde el 24 de agosto, la línea telefónica 800 600 909, sin costo para quien llama, y que permitirá brindar apoyo emocional inmediato. Esta línea interactuará con una plataforma web, donde los usuarios podrán crear un perfil y acceder a información personalizada que resuelva requerimientos específicos producto del COVID-19.
En la UFRO, el proyecto es liderado por Dr. Manuel Ortiz y opera con estudiantes voluntarios de la carrera de Psicología. En su etapa inicial, CALMA se implementará con la atención a estudiantes de la Universidad de La Frontera, para posteriormente incorporar en forma gradual a todos los funcionarios de la Institución.
Se estima que el proyecto, financiado por la UFRO, tenga una duración paralela al de la pandemia, con una capacidad de atención de 60 llamadas diarias. El horario de atención es de lunes a viernes de 14:00 a 17:00 horas.