¿Es la bondad, la amabilidad, la bonhomía, el hacer algo por otro sin un interés y la ingenuidad una debilidad en nuestros tiempos y en nuestras sociedades?, ¿es esta actitud de vida entregarles a otros la posibilidad que abusen de ti solo por ser así?
Son las preguntas que el profesor Bruno Toro rescata de esta cinta, presentada por una de las grandes promesas del cine italiano, la directora Alice Rohrwacher, “la cual no rehúye el clásico gusto de la cinematografía de este país por la realidad y la fantasía, es tal la influencia de estos elementos que la anécdota que da pie a la historia que se narra es recogida de la misma prensa italiana”, cuenta el experto en cine de la Universidad de La Frontera.
Lazzaro es un joven campesino de excepcional bondad, vive en La Inviolata, una aldea que ha permanecido alejada del mundo y es controlada por la marquesa Alfonsina de Luna. Allí, la vida de los campesinos no ha cambiado nunca; son explotados, y ellos, a su vez, abusan de la bondad de Lazzaro. Un verano, se hace amigo de Tancredi, el hijo de la Marquesa. Entre ellos surge una amistad tan preciosa que hará viajar a Lazzaro a través del tiempo y le llevará a conocer el mundo moderno. Es lo que nos adelanta la sinopsis de esta película estrenada el 2018 ganadora en Canes, Sitges, National Board of Review y nominada otros importantes premios internacionales.
La película será presentada este jueves 6 de junio, a las 19:00 horas con entrada absolutamente gratuita en un nuevo encuentro del Ciclo de Cine Contemporáneo, organizado por la Facultad de Educación Ciencias Sociales y Humanidades de la UFRO y el apoyo de la Dirección de Bibliotecas y Recursos de Información.
Comentario
Continuando con el comentario del coordinador de este Ciclo, el profesor Toro, “el filme se construye en base a dualismos que juegan al interior de la obra, como un campo y un contracampo, dejando espacios para que las metáforas sean absorbidas por el espectador y de paso estableciendo los trasfondos bíblicos del nombre del protagonista: Lazzaro, entonces es en ese sentido como se justifica la presencia constante de la idolatría a los Santos, las supersticiones y el mundo católico cristiano propio de ellos.
Desde la mirada de la construcción del filme son dos puntos interesantes a destacar, la técnica en la filmación de los planos con una fotografía trabajada e intencionada bajo el soporte del formato Súper 16 mm y por otro lado la dirección de actores, los cuales muchos no lo son en realidad, y el protagonista es un absoluto debutante en las lides profesionales
Finalmente, la cinta nos propone un estilo tipo fábula, la cual solo crítica de manera abierta las formas de vida modernistas y primermundistas, apoyadas en el explícito abuso del poder y la explotación del hombre por el hombre.